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La Comisión Europea publica una evaluación intermedia del Marco de la UE para las Estrategias Nacionales de Inclusión de la Población Gitana [editar]

Esta evaluación se basa en un amplio proceso de consulta de autoridades públicas, organizaciones de la sociedad civil (entre ellas la FSG) y otros actores relevantes

11 de Diciembre de 2018
FSG internacional

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La Comisión Europea publica una evaluación intermedia del Marco de la UE para las Estrategias Nacionales de Inclusión de la Población Gitana

La evaluación, que cubre el periodo 2011-2017, se basa en un amplio proceso de consulta de autoridades públicas, organizaciones de la sociedad civil (entre ellas la FSG) y otros actores relevantes. Pretende proporcionar información a la propia Comisión Europea y a opartes interesadas para articular su trabajo en los años que quedan de implementación del marco actual y en la preparación del futuro marco tras el 2020.

El 4 de diciembre la Comisión Europea publicó la evaluación intermedia del ‘Marco de la UE para las Estrategias Nacionales de Inclusión de la Población Gitana hasta 2020’, que cubre el periodo 2011-2017. La evaluación valora el funcionamiento en la práctica del Marco de la UE 2011-2020 y los retos pendientes. Esta evaluación tiene como objetivo proporcionar información a la propia Comisión Europea y a otras partes interesadas para articular su trabajo en los años que quedan de implementación del marco actual y en la preparación del futuro marco tras el 2020.

Para la elaboración de esta evaluación se han usado diferentes fuentes, incluida una consulta pública y un estudio de evaluación externa, que incluyó entrevistas y contactos con actores clave, incluidas autoridades públicas a nivel nacional y europeo y organizaciones de la sociedad civil. La FSG contribuyó a la consulta pública y fue invitada, como actor relevante a nivel nacional y europeo, a participar en varias de las iniciativas desarrolladas en el marco de la evaluación externa, tales como la reunión para validar los resultados preliminares.  

La evaluación pone de manifiesto que el Marco de la UE ha resultado fundamental para el desarrollo de los instrumentos y estructuras a nivel nacional y europeo destinados a promover la inclusión de la población gitana, pero que el objetivo de «acabar con la exclusión de los gitanos» no se ha alcanzado.

Tanto las conclusiones de la evaluación como las anteriores evaluaciones anuales de las estrategias nacionales indican una serie de prioridades clave en las que habría que centrarse, entre ellas:  

  • Un abordaje más eficaz de las necesidades de las personas gitanas en las políticas generales. Se debería seguir una doble estrategia que combine la consideración de las personas gitanas en las políticas generales en ámbitos tales como la educación, el empleo, la sanidad o la vivienda, junto con medidas explícitas para superar las desventajas especificas y garantizar una igualdad de acceso efectiva en los diferentes ámbitos. Además, debe reforzarse la coherencia entre el Marco de la UE y otras políticas, tanto a nivel de la UE como internacional, así como intensificarse la vinculación entre las prioridades políticas y la financiación de la UE, incluidos los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos (Fondos EIE). En este sentido, la Comisión Europea propone a los Estados miembros hacer un uso pleno de la prioridad de inversión relativa a la inclusión socioeconómica de comunidades marginadas tales como la de la población gitana (9.2.) en el actual Reglamento del Fondo Social Europeo y mantener esta prioridad de inversión en los Reglamentos de los Fondos EIE para el próximo periodo de programación 2021-2027.       
  • Una mayor atención a la lucha contra la discriminación y el antigitanismo. La evaluación pone de manifiesto la necesidad de prestar una mayor atención a la lucha contra la discriminación y el antigitanismo en el Marco de la UE que complemente, y no sustituya, al enfoque integrador. Estos ámbitos deberían constituir un ámbito prioritario del Marco con un objetivo específico de no discriminación, al mismo nivel que los ámbitos prioritarios de inclusión de la población gitana establecidos en el actual marco (empleo, educación, vivienda y salud), a la vez que se mantiene como prioridad transversal con objetivos específicos en cada uno de los otros cuatro ámbitos de actuación.  
  • Una mejora de los partenariados y la participación de las personas gitanas. En términos generales, las estrategias nacionales no conectan eficazmente con las políticas generales, dado que éstas no implican a los sectores clave y a las partes interesadas de forma coherente. Para abordar esta deficiencia se requiere el empoderamiento y el desarrollo de las capacidades de las personas gitanas, las organizaciones de la sociedad civil, las autoridades públicas, en particular los Puntos de Contacto para las Estrategias Nacionales, y las autoridades locales. Se destaca la participación continuada y coordinada de las organizaciones de la sociedad civil en el diseño, la aplicación y la supervisión de las políticas  de inclusión.  
  • Una mayor consideración de la diversidad de la población gitana. Las estrategias nacionales deben reflejar mejor las necesidades de los grupos específicos (en particular las mujeres, los jóvenes, los niños) y la diversidad de condiciones entre la población gitana (por ejemplo incluyendo objetivos e indicadores explícitos en cada uno de los ámbitos principales). Asimismo, hace falta una mayor consideración de las necesidades de los gitanos que se desplazan dentro de la UE, los nacionales de terceros países o los gitanos apátridas. 
  • Mejor fijación de objetivos, recogida de datos, supervisión e información que permitan el aprendizaje a nivel político. El sistema de supervisión e información de las estrategias nacionales debe facilitar información a nivel de políticas y de programas, así como información explícita sobre acciones específicas y sobre las acciones para promover unas políticas generales más integradoras. Deben mejorarse la disponibilidad y la desagregación de datos para garantizar que se dispone de los datos adecuados para supervisar la ejecución, los logros y la eficiencia. Según la evaluación, complementar los cuatro ámbitos prioritarios con la lucha contra la discriminación y el antigitanismo, como un requisito transversal y como un ámbito separado, y especificar una cartera de objetivos de inclusión de las personas gitanas, que se pueda adaptar de forma individual, con sus correspondientes objetivos e indicadores, mejoraría la eficacia y la pertinencia del Marco. Podrían seleccionarse objetivos nacionales específicas a partir de una lista detallada de objetivos e indicadores optativos para cada ámbito (metas diferenciadas en un marco común).
  • Una mayor ambición de los progresos durante la fase de preadhesión de los países candidatos. El fomento de la igualdad de acceso a la educación, el empleo, la sanidad y la vivienda se ha incorporado como parte del proceso de ampliación. Todos los países de la ampliación han adoptado una estrategia nacional de inclusión de la población gitana, han designado puntos de contacto nacionales y utilizan sistemas de presentación de informes anuales similares a los de los Estados miembros.

La FSG está de acuerdo con que, como indica la evaluación, el Marco de la UE para las estrategias nacionales de inclusión de la población gitana hasta 2020 es el inicio de un proceso que, pese a sus numerosas limitaciones y teniendo en cuenta la enorme tarea que supone, ha arrojado resultados positivos y ha generado un cambio de tendencia. Sin embargo, tal como refleja la evaluación, quitando algunos avances, no es tangible la reducción de las desigualdades a las que se enfrenta la población gitana en los distintos países europeos, habiendo grandes diferencias entre ellos. Por ello, queda mucho por hacer tanto en el contexto del actual Marco de la UE (2011-2020) como del futuro marco (2021-2027).

Compartimos gran parte del análisis de la Comisión Europea y consideramos especialmente importantes el desarrollo y reforma de políticas generalistas que sean inclusivas con la población gitana, el avance en las estructuras de coordinación y cooperación a nivel nacional, regional y local, la dotación de mayores competencias y mandato a los Puntos Nacionales de Contacto así como la intensificación de las inversiones y la dotación presupuestaria de las actuaciones que den cumplimiento a los objetivos de las Estrategias con el fin de mejorar, de una vez por todas, las condiciones de vida de la población gitana y en abordar expresamente y sin dilación, la discriminación y el antigitanismo que sufre diariamente la población gitana. Un mejor uso de los Fondos EIE, con inversiones estrategias de escala y duración en el tiempo y conectadas con las prioridades políticas es esencial. Para ello, es clave el alineamiento, la complementariedad y la coordinación entre el Marco para las Estrategias Nacionales y los Fondos EIE. La coincidencia de los actuales procesos de definición de los marcos para los Fondos EIE y para las Estrategias Nacionales más allá del 2020 ofrece una oportunidad sin precedentes para alinear y crear sinergias entre estos dos instrumentos.

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